4 tendencias tecnológicas emergentes en la agricultura para definir el futuro de la agricultura

La agricultura ha recorrido un largo camino desde sus humildes comienzos hace más de 10.000 años. Mientras que nuestros antepasados desarrollaron prácticas rudimentarias para el cultivo básico de plantas comestibles, hoy en día nuestras operaciones agrícolas implican la aplicación cuidadosa de varios principios científicos y algunos de los desarrollos tecnológicos más emocionantes del mercado.

Los efectos positivos de estos avances son variados, y van desde mayores rendimientos y cosechas más grandes hasta la reducción de residuos y una menor huella de carbono. Las empresas de alimentos y bebidas con la vista puesta en el futuro ya están invirtiendo en herramientas agrícolas de vanguardia para obtener una ventaja sobre la competencia, y es muy probable que su empresa se beneficie de hacer lo mismo.

En esta publicación, le brindamos información sobre cuatro de las tecnologías emergentes más prometedoras en la agricultura. La agricultura del mañana ya está aquí: siga leyendo para conocer los nuevos dispositivos y sistemas que están impulsando el progreso y desbloqueando mejores resultados para organizaciones como la suya.

1. Imágenes aéreas

Los agricultores se lanzan cada vez más al cielo para controlar sus cultivos. Si bien nadie está abandonando el suelo, los drones y satélites que monitorean los campos y recopilan datos sobre todo, desde la biomasa y la altura de las plantas hasta la presencia de malezas y el nivel de saturación de agua, están aumentando su popularidad.

Además, los dispositivos de imágenes aéreas pueden utilizar la tecnología del sistema de información geográfica (SIG) para analizar la eficacia de los planes de riego y sus efectos en la degradación de la tierra, la erosión y el drenaje. Y las imágenes tan nítidas como para permitir la evaluación del follaje de una planta individual no solo son completamente posibles, sino que se están utilizando activamente para detectar plagas y enfermedades para que los cultivos puedan salvarse de las amenazas ambientales.

En cuanto a las diferencias entre los casos de uso de drones y satélites, ambos pueden cumplir la mayoría de las funciones críticas de la tecnología de imágenes aéreas, pero cada uno tiene sus pros y sus contras. Por lo general, los drones pueden capturar y transmitir información más rápido, pero pueden ser prohibitivamente caros y no pueden cubrir grandes parcelas de tierra a la vez. Los satélites pueden realizar imágenes espectrales para analizar el contenido de clorofila y nitrógeno, pero el acceso y la disponibilidad a veces son limitados debido a los cortes y la nubosidad.

2. Maquinaria automatizada y robótica

La imagen mental de un granjero montando un tractor a través de sus campos viene fácilmente a la mente, pero el hecho es que la presencia de un humano ya no es necesaria. Los tractores autónomos son ahora una realidad, al igual que los vehículos robóticos más pequeños que pueden desplazarse entre hileras de cultivos y analizar rápidamente las condiciones y transmitir la información a una base de datos central.

El líder en maquinaria agrícola John Deere anunció recientemente su nuevo tractor autónomo 8R, y esta tecnología pionera está lista para la producción a gran escala y estará disponible para que los agricultores la compren a finales de 2022. Mientras tanto, empresas como Harvest Automation y Nexus Robotics han desarrollado robots para recoger productos delicados y eliminar las malas hierbas, respectivamente.

Hay muchas otras aplicaciones para la maquinaria automatizada, incluida la siembra, el riego y la aplicación de fertilizantes y pesticidas. Al igual que los drones, muchos de estos dispositivos siguen siendo costosos de adquirir y mantener, pero un futuro en el que las operaciones agrícolas puedan enviar su flota robótica para atender sus plantas puede no estar tan lejos.

3. Sensores de suelo de Internet de las cosas

Lograr una mayor conectividad en la agricultura tiene el potencial de tener un impacto dramático, y McKinsey & Company predice que una infraestructura más conectada podría resultar en un aumento de $ 500 mil millones en el producto interno bruto mundial. Los dispositivos de Internet de las cosas (IoT) son un componente clave de esa visión, y algunos de los productos más valiosos en esa categoría incluyen sensores de suelo.

Debido a que la composición del suelo tiene un gran impacto en la calidad de las frutas y verduras producidas, obtener los equilibrios químicos y el contenido de humedad correctos es crucial para optimizar los resultados. Los equipos que se encuentran en el mercado hoy en día de fabricantes como Monnit y Sensorex pueden medir con precisión las variables clave e informar sobre las intervenciones necesarias.

Más allá de su función de monitorear las condiciones para mantener las plantas más saludables, los sensores de IoT tienen el beneficio adicional de reducir la carga de los empleados para realizar trabajo físico en el campo. Las lecturas se transmiten de forma automática e instantánea a cualquier sistema central que la empresa haya implementado, lo que representa un método mucho más eficiente en comparación con los medios manuales.

4. Hidroponía y Agricultura Vertical

Como cubrimos en una publicación anterior, las ventajas de la agricultura hidropónica son muchas, con mejores rendimientos, menor consumo de agua e incluso mejor sabor y textura de los productos finales. Cuando se combina con la agricultura vertical, las posibilidades son prometedoras: las fuentes confiables de productos frescos y saludables incluso en centros urbanos abarrotados ya están en funcionamiento gracias a marcas como Bowery Farms y Plenty.

Las plantas cultivadas con métodos hidropónicos no necesitan sistemas radiculares extensos, lo que les permite dedicar más energía a la producción de hojas y frutos. También alcanzan la madurez más rápido y están a salvo de plagas y enfermedades debido a su cultivo interior.

Y en lo que respecta a la sostenibilidad, la menor huella de las granjas verticales permite que se ubiquen más cerca o incluso dentro de áreas de alta densidad de población, lo que reduce la necesidad de transporte y las emisiones nocivas asociadas a él. Estas instalaciones también pueden tener un ciclo de cultivo durante todo el año, lo que las hace más eficientes y capaces de entregar artículos que de otro modo estarían fuera de temporada, independientemente del clima local.

Sentar las bases con la solución adecuada

Ya sea que su organización esté lista para implementar algunas de estas nuevas tecnologías o simplemente esté interesada en trabajar con socios de la cadena de suministro que ya lo han hecho, necesitará la base digital adecuada para hacerlo. Para eso, no hay nada mejor que una solución de planificación de recursos empresariales (ERP) específica de la industria de un proveedor que conozca el mercado de alimentos y bebidas por dentro y por fuera.

En Aptean, hemos aprovechado décadas de experiencia colectiva y un profundo conocimiento de las mejores prácticas para crear nuestro ERP especializado en alimentación. El sistema cuenta con un conjunto completo de funciones sólidas, incluidas varias específicas para empresas de productos frescos, como el seguimiento de envíos y un portal para productores.

Además, en lo que respecta a la introducción de nuevas tecnologías en sus operaciones, comenzamos con un marco de Microsoft Dynamics 365. Esto garantiza que nuestro producto se pueda actualizar sin problemas y esté siempre a la vanguardia en cuanto a integración con nuevos dispositivos y sistemas complementarios. Además, está respaldado por nuestros equipos de TI dedicados y servidores redundantes, lo que le brinda una plataforma confiable y multifuncional para la gestión de datos y la ejecución de procesos críticos.

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